Sentado en una terraza saboreo el entusiasmo de una radiante pareja. Suena un teléfono móvil, risas y nervios. La chica observa, el chico contesta: - ¡Mamá!, ¡vas a ser abuela!
Nunca olvidaré el día que nos conocimos, Tu imagen ha quedado impresa en mi memoria en alta resolución. Tantos pequeños matices.., la luz del mediodía realzando el brillo natural de tu piel; tu carita de incredulidad interrogándome acerca de dónde había salido y qué me había llevado hasta ti; tu pelo rapado, tus hoyuelos, tus enormes ojos negros.